lunes, 20 de agosto de 2012

UNA PINTURITA Todos tuvieron una infancia signada por la cajita o la valijita de fibras Sylvapen.


Los marcadores de Sylvapen protagonizaron las tardes plásticas de muchos infantes durante los ochenta. Dibujos, tareas escolares, mamarrachos lúdicos. Las fibras multicolor estuvieron presentes en trazos libres, sin presiones ni restricciones formales. Un recuerdo entre papeles manchados de café con leche.

2 comentarios:

El rincòn de mi niñez dijo...

Me muero...los sylvapen soldaditos.No las recordaba hasta hoy.
Del ITAL ni hablar, lo recuerdo a diario

mariana dijo...

Siii,yo tenía las que venían en caja de cartón,era la cabeza de un soldadito,y abría la boca y se veían las fibras adentro...Qué buen recuerdo...